LOS BOLADILLOS MÁGICOS. AUTORA: NATALIA. 1ª
Había una vez una niña llamada Natalia. A Natalia, le gustaban mucho los boladillos rellenos de gambas.
Un día su mamá Loli, le hizo para cenar. Tantos comió que se quedó dormida...
Soñó que había invitado a su clase a comer boladillos de los que hacía su mamá.
Pero... ¡qué sorpresa! los boladillos eran mágicos:
El boladillo de Nerea estaba relleno de flores; el de Celia estaba relleno de pasteles; el de Evelin de estuches; el de Rafa de ranas saltando; el de Alfredo de bicicletas; el de Alvaro M. de balones, el de Sonia de canciones...
Todos se pusieron muy contentos cuando vieron la sorpresa que tenía su boladillo.
FIN
UNA CIUDAD EN JÚPITER. AUTOR: RAFAEL. 2º
Había una vez una ciudad en Júpiter. Un niño llamado “Pepito el Pepino”. En la tierra los niños tenían 7 años pero en Júpiter los niños tenían 1000 años.
“Pepito el Pepino” era muy listo y se inventó un cohete. Pero cuando le faltaban 75 años para llegar a la tierra se le gastaron las pilas.
“Pepito el Pepino”, su tía Loli, su tatatatarabuelo Martín. Su padre se llamaba Luis Cañero Malvado.
Así se llamaba la familia de Pepito Pepino.
Unos astronautas vieron a la familia de Pepito y los salvaron.
Los llevaron a Júpiter. “Pepito el Pepino” se quedó con la ilusión de ir a la tierra.
Pero aunque no vio la tierra, vio Saturno, Marte y todas las estrellas.
Los astronautas dijeron que si quería ir a la tierra. Dijo que si.
Al final conoció la tierra.
FIN.
LOS TRES AMIGOS DE BERTA. AUTOR: ALEJANDRO J. 3º
La oveja Berta no tenía ningún amigo. Berta era lista, muy lista y como los otros niños eran muy brutos… por eso no tenía amigos.
Berta, a la hora del recreo, pensaba y pensaba en tener amigos. Y venga a pensar y pensar.
Hasta que se le ocurrió una idea.
Le dijo a su mamá:
-Mamá, mamá busca amigos con hijos.
Y su mamá le dijo:
-Vale, voy a encontrar en el ordenador.
Encontró tres amigos con hijos y les dijo:
-Apuntaros al colegio de Berta.
Los apuntaron. Llegó la hora del recreo y Berta se divirtió con los tres amigos.
Fueron amigos para siempre.
ENAFORCA LA BALLENA ORCA. AUTOR: RICARDO.
Érase una vez una ballena orca que se llamaba Enaforca. Era una orca porque al creador de este cuento le gustan las ballenas orcas.
Hacía la compra, los llevaba al colegio, los llevaba de paseo al bosque de algas. El colegio es de corales y de rocas. Un hijo se perdió en el bosque de algas y encontró el petróleo y la madre se preocupó mucho más que un humano joven. El petróleo era de un barco inhabitado en el mar Atlántico.
Continuará...
ALICIA Y SU PERRO. AUTORA: CELIA.
Alicia era una niña muy educada. Un día estaba paseando por su calle y se encontró un perro y se lo quedó.
FIN.
EL MUNDO MÁGICO. AUTORA: EVELIN.
Había una vez un mundo de magia. El más joven se llamaba Efrén que significa criatura indefensa. Era el aprendiz del Gran Mago Franchez.
Era el más mágico de todos.
Un día Efrén se encontró con una ninfa y el aprendiz le dijo:
- Eres bella como una rosa.
Al día siguiente la ninfa le contó un secreto:
-Mi cisne se ha puesto enfermo.
El aprendiz dijo:
-Hay un remedio, pero está en mi país. Está muy lejos y solo se llega por un portal secreto.
El cisne los llevó y lo encontraron. Se lo dieron y se recuperó.
Regresaron y se enamoraron.
FIN.
EL NIÑO MÁS PEQUEÑO DEL MUNDO. AUTOR: JOHN.
En el 2010 nació un niño. Era muy pequeño. Era como la mano. Cuando lo vio dio un grito que llegó a Marte.
Se creía que era una lagartija.
Pasó el tiempo. Ya tenía cuatro años. Todos eran más grandes que él.
A él no le gustaba que fueran más grandes que él.
Su madre le dijo que no pasaba nada que fueran más grandes que él.
Él le preguntó:
-¿Es que no hay ninguna medicina?
Su madre le dijo:
-No, no hay ninguna medicina.
Me voy a la calle a jugar.
Te he comprado una cosa que te va a gustar. Un MP3.
FIN.
Érase una vez una niña caprichosa que se llamaba Laura. Ella siempre pedía todo a sus padres.
Si decían que no la niña se enfadaba mucho. Al final tuvieron que decir que si.
Estaba contenta porque podía hacer lo que le daba la gana. Pero al hacer lo que quería, empezaba a aburrirle.
Entonces fue a hablar con sus padres para pedirles que volvieran a impedirle algunas cosas.
FIN.
LAS TRES AMIGAS. AUTORA: CARMEN.
Érase una vez tres niñas que siempre estaban jugando juntas. Un día en el colegio se iba a celebrar una fiesta y decidieron hacer un baile.
Después de muchas horas de hacerlo a una le salió mal. Por su culpa a las otras no le salía bien.
Las dos amigas le dijeron a la otra que no bailara con ellas.
La niña se fue muy triste. Se encontró con un profesor y le dijo:
-¿Qué te pasa?
La niña se lo contó. El profesor le dijo:
-No te preocupes, yo te voy a ayudar.
La niña y el profesor se pusieron a practicar y la niña lloraba porque que no lo iba a hacer bien. Cuando llegó el día primero bailaron las dos amigas.
Luego otros niños y al final ella.
Estaba muy nerviosa y no quería hacerlo, pero el profe le dijo que si.
Salió y la ganadora fue ella.
Las dos amigas se arrepintieron de haberle dicho que no bailara con ellas.
FIN.
EL MUNDO AL REVÉZ. AUTORA: MARÍA.
Había una vez un niño llamado Javier. En verano se ponía manga larga y en invierno se ponía manga corta.
También la ciudad estaba del revés.
También había una niña llamada Sonia que tenía un perro llamado Robi. Fueron de paseo Sonia y Javier pero se metía con los perros grandes.
FIN.
EL PERRO QUE NO SABÍA ANDAR. AUTOR: ÁLVARO O.
Érase una vez un perrito que no sabía andar. La mamá del perrito no sabía como ayudarle a caminar. Estaba preocupada.
Su dueño se dio cuenta y se puso manos a la obra.
Durante varios días enseñó al pequeño perrito a ponerse de pie y a mover sus patitas bien.
Un día, al verlo venir, el perrito salió solo del cojín muy contento de verlo. Había aprendido a caminar. Ese día los tres jugaron muy contentos.
EL TRAPO QUE ANDABA QUE SERVÍA PARA LA COCINA.
AUTOR: ALEJANDRO G.
Había una vez un trapo que era para limpiar las cocinas. Un día estaba en el supermercado que se llamaba Mercagranada.
Un día Micheltelo le cogió para llevárselo a casa. Micheltelo lo sacó de la bolsa y se asustó tanto que se cayó al suelo. Después de caerse se chocó con la ventana. El trapo pisó el pulsador de la basura.
Micheltelo lo sacó de la basura, lo mojó con agua, después Micheltelo limpió sus cristales al pañuelo le dolió tanto que se oía en Marte, Júpiter, Mercurio, Saturno, Venus, Urano, Neptuno y Plutón.
Micheltelo se fue corriendo al mercado para que le dieran otro trapo que esté muerto.
El pañuelo se quedó más a gusto que el Sol.
FIN
Había una vez una niña muy mala porque quería un perro y sus padres le castigaban diez días sin ver las Monster High y la niña se enfadaba.
La niña se iba para el cuarto y no jugaba ni con sus juguetes ni con sus peces.
Como nos los cuidaba empezaron a morirse.
Entonces empezó a llorar y la madre como no aguantaba más a la niña habló con ella.
Compró un gato, un perro y un loro. Desde ese día la niña se portó muy requete yupi bien.
Cuidó todos los animales.
FIN.
JOSÉ EL CONEJO. AUTOR: ALFREDO.
Érase una vez un conejo que quería tener un mueble. Siempre le estaba pidiendo a su papá y mamá conejo que comparasen un mueble.
Su papás le decía que no. Y siempre así.
Cuando fue su cumpleaños su papá y su mamá le compararon el mueble y desde ese día estuvieron más tranquilos.
José comprendió que los regalos eran en el cumple, o de vez en cuando y que los papás no podían comprar todo lo que quería porque hacían un niño caprichoso.
José no le dijo que les compraran más regalos a sus papás. Se pusieron muy, pero que muy contentísimos.
FIN
EL NIÑO QUE QUERÍA VER LA NIEVE. AUTOR : RUBÉN.
Érase una vez un niño que quería ver la nieve. Un día que su padre se iba a la sierra, él quería ir. Pero su padre no le dejaba.
Un día se escapó de su casa para ir al Polo Norte.
Recorrió mil pueblos hasta llegar al Polo Norte.
Lo vio todo blanco porque estaba todo cubierto de nieve.
Vio un iglú. Se metió y vio esquimales. También había pingüinos. Se divertía mucho.
Sus padres estaban preocupados por él.
Un día sus padres fueron al Polo Norte a buscarlo. Al llegar se alegraron mucho de verle.
Se quedaron allí un mes entero.
Se divirtieron mucho y colorín colorado este cuento nevado se ha terminado.
FIN
PABLITO Y SU RANA. AUTORA: SONIA.
Había una vez un niño llamado Pablito. Una mañana fría de invierno mamá lo llamó como todas las mañanas para ir al colegio.
Pablito tenía un poco de tos pero aún así quiso ir al cole porque le gustaba mucho.
Hizo el camino de todas las mañanas acompañado de su madre y pasando el pequeño puente que cruzaba el riachuelo, una ranita saltó y se posó en su hombro. Al principio se asustó pero la rana le dijo:
-¡No te asustes Pablito, solo quiero curarte la tos! Llévame contigo, me meteré en tu bolsillo y te prometo que no haré ruido.
Fue así como al final del día la tos de Pablito desapareció. Así que se quedó con la rana para siempre. Fue su mascota preferida.
Érase una vez una estrella llamada Estrellita. Era muy feliz con su brillo en el cielo.
Un día en el cielo se le perdió su brillo. Empezó a llorar. Le gustaba mucho su brillo porque la protegía.
Todos los compañeros de Estrellita se preocupaban por ella en la escuela de estrellas. Estaba tan triste que empezó a llorar mucho porque quería volver al colegio con sus amigos para estudiar mucho.
Cuando fue otra vez se pusieron todos muy contentos porque empezó a brillar otra vez.
Y colorín colorado esta estrellita ya ha brillado.
FIN.
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